CARLOS FIGUEROA DÍAZ, EL UNIVERSAL - Viernes 23 Octubre de 2009
Para Carlos Mauricio Chávez, el trabajo que desarrolla como ‘Vale del Almirante Padilla’ es la luz que se le presentó en un camino que para él estaba lleno de oscuridad. Había llegado a esta selva de cemento llamada Cartagena, luego de dejar su tierra natal, Achí (Sur de Bolívar), como uno más de los desplazados por la violencia que recibe esta ciudad. Hoy Carlos Mauricio vela por el bienestar de su familia, con la que habita en el barrio San José de Los Campanos, gracias a los recursos que devenga de este oficio con el que le sirve a la comunidad.
Con obras de teatro, los Vales del Almirante Padilla le han enseñado a los ciudadanos de la importancia de utilizar las cebras para evitar accidentes.
Otros ejemplos
Al igual que Carlos Mauricio, la joven Sandra Bertel Díaz, habitante del barrio Olaya Herrera, sector Zarabanda, e Hilda Vargas, del mismo barrio, sector Playa Blanca, asimilan este programa como un salvavidas. En momentos de vicisitudes pudieron ver más allá de lo que les ofrecía su comunidad: en un estudio fueron consideradas como jóvenes en riesgo. “En estas comunidades, las drogas y la guerra entre pandillas se han convertido en el pan de cada día”, aseguran las jóvenes entre 22 y 24 años. Dicen que su labor cívica no sólo la desempeñan en el Centro de Cartagena, guiando a los transeúntes locales y visitantes, también ayudan a multiplicar el amor hacia el otro, con sus vecinos, a quienes estiman sus amigos y hermanos. “Cuando en una comunidad como la nuestra, estos jóvenes, quienes están vinculados a malos procedimientos, observan que tenemos un cambio, ellos también lo desean y miran que, a pesar de la pobreza y la dificultad, se puede lograr”, explican.
Los Vales
‘Vales del Almirante Padilla’ es uno de los programas bandera de la Escuela de Gobierno y Liderazgo, y tiene la finalidad promover la cultura ciudadana, por ejemplo, enseñándole a los cartageneros a respetar las normas de tránsito, utilizando las cebras y cruzando la vía sólo cuando el semáforo peatonal esté en verde. A través de este programa, la administración de Judith Pinedo pretende contribuir al buen uso, goce y disfrute del espacio público, mediante la promoción de prácticas ciudadanas orientadas al respeto por las normas. Son 78 los jóvenes que hacen parte de los ‘Vales del Almirante Padilla’. El año pasado fueron 90. El grupo lo conforman discapacitados, desplazados y jóvenes en riesgo, habitantes de las tres localidades de en que se divide administrativamente Cartagena. Es un programa incluyente de personas a las que nunca se les había dado la oportunidad de vincularse al mercado laboral (jóvenes en riesgo, madres cabezas de hogar y desplazados), quienes son seleccionadas luego de un estudio de sus capacidades de liderazgo, entre otros detalles, explica Olga Acosta, directora de la Escuela de Gobierno y Liderazgo.
MANEJO DE RECURSOS
La Escuela de Gobierno y Liderazgo ha ejecutado el 67% de su presupuesto, es decir, unos $1.265 millones que hacen parte de los $1.889 millones asignados para esta vigencia. Su fuente de financiación son los reintegros de contribución por valorización, ingresos corrientes y gestiones ante la Cooperación Internacional, que ha aportado a la entidad unos $500 millones. Conforme al programa Cartagena Cómo Vamos, hoy esta entidad es una de las más reconocidas en el Distrito, pasando de ser las más ignorada en el 2005 a tener una imagen favorable de 56% en el 2008, y de 78% en el 2009. En el 2008, la Escuela de Gobierno y Liderazgo capacitó a 3.785 personas, y en lo que va del 2009, a 5.248, logrando, según su directora Olga Acosta, duplicar la gestión de administraciones pasadas.
Otros programas
Además de cultura ciudadana, la Escuela de Gobierno enfoca su actividad en los programas “Cartagena pide la palabra”, conocido como “Trasmallo Ciudadano”. También “El servidor soy yo” y “Por el Camino de la Independencia”. En cada programa se busca la participación activa y confianza de la ciudadanía, la inclusión social y formar a los servidores públicos para construir un mejor gobierno.